viernes, febrero 27, 2015

Fe de erratas: mi no colaboración en la edición española de "Astro City 3: Vidas privadas"

Los pocos que sigáis este blog sabréis que desde junio de 2012, fecha de publicación de "Leyendas del Universo DC: Neil Gaiman", he estado colaborando esporádicamente con la editorial ECC, que posee los derechos de publicación en España de los títulos de DC Comics. En total he participado en las ediciones en castellano de 10 tomos correspondientes a series como "American Vampire", "Scalped", "The Unwritten" o "Astro City", además de un texto para la web acerca de "Spaceman". Hace ya un tiempo que no recibo nuevos encargos por parte de ECC, siendo los dos últimos el tomo recopilatorio de la miniserie "Trillium" y el volumen 2 de "Astro City" titulado "Victoria" (tal y como podéis comprobar en la columna de la derecha en esta misma web).


El pasado miércoles acudí a mi librería habitual a cosechar las primeras novedades de marzo (ya sé que aún estamos en febrero, pero Norma y ECC suelen lanzar sus publicaciones siempre unos días antes de que termine el mes): el primer volumen de la muy recomendable "Ciencia Oscura" de Remender y Scalera, el tomo final de la etapa de Azzarello y Chiang al frente de "Wonder Woman" y "Astro City 3: Vidas privadas". Tenía una curiosidad especial por saber si finalmente habrían incluido un texto editorial a modo de prólogo o epílogo en el nuevo tomo de "Astro City" porque ésta era, precisamente, una de las series en las que hasta entonces yo había participado. En el caso del último "American Vampire", el tomo 7, no había texto de ningún tipo para dejar espacio a las portadas y algunos anuncios de otro material de la editorial. Sin embargo, "Astro City 3: Vidas privadas" si contiene en sus últimas páginas un texto que aparece... firmado con mi nombre.


Mi primera reacción fue un enorme "WTF?". Allí, en medio de Elektra Comics. La segunda, pensar: "¿lo habré redactado, corregido, enviado y facturado bajo la influencia de las drogas y por eso no lo recuerdo?". Tampoco recordaba haber leído en inglés los episodios de "Astro City" incluidos en el nuevo tomo. De hecho no he leído nada de la colección en inglés desde el final del arco argumental incluido en "Victoria". No obstante, hace un tiempo descubrí unas declaraciones en las que Stephen King afirmaba no recordar haber escrito algunas de sus novelas de la década de los 80 por culpa de su adicción al alcohol y la cocaína. Mi argumento definitivo en contra de esta hipótesis, sin embargo, reside en el hecho de que nunca he consumido drogas, puedo contar con los dedos de una sola mano las veces que me he emborrachado y, de hecho, hace tanto tiempo que no salgo de fiesta que para mí la palabra "fiesta" está ahora más asociada al fabricante de chupa-chups y golosinas que al hecho de quedar con los amigos, comer guarro, hacer bailes ridículos y arreglar el mundo en conversaciones etílicas a las 5 de la mañana.

Alucinado y sin ningún tipo de explicación capaz de satisfacer a mi morbosa imaginación, le envié un e-mail a la persona responsable de la contratación de colaboradores externos en ECC; la misma persona que me había ofrecido mis últimos trabajos como articulista para la editorial. Su respuesta fue que se había producido un error en el proceso de maquetación y que (cito textualmente) "el diseñador, al copiar y pegar diseño del artículo para luego cambiar el texto, se dejó el nombre del articulista anterior". El autor del texto que aparece al final de "Astro City 3: Vidas privadas" no es, por consiguiente, un servidor sino otra persona: Jorge García. No conozco a Jorge, pero lamento que se haya tomado la molestia de redactar, corregir y enviar un texto a la editorial para que finalmente haya sido atribuido en su publicación impresa a mi persona.

Desconozco si ECC hará algún tipo de comunicado al respecto (cosa que dudo, porque al final esto sólo nos atañe a Jorge García y a mí), así que he preferido explicarlo en mi blog, no sea que alguien se compre el tomo, lea el artículo de marras y piense (con toda lógica) que he sido yo quien lo ha escrito. Vamos, que si os ha gustado el texto no es a mí a quien debéis felicitar.

Aclarado el asunto, posiblemente lo que más le interese a quien esté leyendo estas líneas sea que "Astro City", como tebeo de super-héroes, sigue gozando de una espléndida salud y que cualquier nuevo recopilatorio que se publique en España de esta colección será por mi parte compra obligatoria, independientemente de qué firma aparezca al pie de sus textos editoriales.

domingo, febrero 15, 2015

Las películas de los Oscars 2015

El próximo 22 de febrero tendrá lugar en Los Angeles la 87 ceremonia de entrega de los premios de la Academia norteamericana de cine. Los Oscars de toda la vida, vamos. Además del retorno al Teatro Dolby, la novedad este año será la participación de Neil Patrick Harris como presentador de la gala.


Como manda la tradición, servidor realiza su repaso anual a las nominadas más importantes, además de vaticinar lo que (tal vez) ocurrirá en la entrega de premios. Y los VereGIFtos, por supuesto.

Pero antes, unos minutos musicales para presentar brevemente las películas nominadas:



Las grandes favoritas

8 películas compiten por el premio más importante de la noche. Aunque, como viene siendo habitual, las candidaturas en otros apartados destacados (dirección, actor o actriz principal, guión, montaje) ofrecen pistas para distinguir a las nominadas con opciones reales ("Birdman" y "Boyhood" parten como grandes favoritas) de aquellas otras que están para hacer bulto (independientemente de su calidad, "Selma" sólo compite en las categorías de mejor película y mejor canción). Llevo años diciéndolo: a mí me gustaba más cuando la Academia nominaba 5 títulos para competir por el premio a la mejor película. Pese a las preferencias personales de cada uno, existía la sensación de que cualquiera de ellas podía resultar ganadora. Este nuevo sistema, instaurado en 2010, es un absoluto paripé. En fin, cosas de la mercadotecnia.

Éstas son las 8 candidatas de este año a mejor película:

El francotirador (American Sniper)


De qué va: biopic sobre el Navy SEAL estadounidense Chris Kyle, oficialmente reconocido como el francotirador que más muertes ha ejecutado en toda la historia (se le atribuyen más de 160 disparos mortales).

A qué está nominada: 6 candidaturas: película, actor principal (Bradley Cooper), guión adaptado, montaje, sonido, efectos sonoros.

Puntos fuertes: el film ha tenido una acogida espectacular por parte del público estadounidense (oh, sorpresa) y cuenta en la dirección con uno de los grandes nombres del cine contemporáneo, Clint Eastwood. El actual clima internacional de islamofobia podría reavivar el espíritu de revancha por los atentados del 11-S que sirvió como argumento para las invasiones de Afganistán e Irak... y ya sabemos lo mucho que le gusta al Tío Sam enarbolar banderas y ametrallar yihadistas.

Puntos débiles: las comparaciones con los dos últimos films de Kathryn Bygelow ("The Hurt Locker" y "Zero Dark Thirty") parecen inevitables. Lo cual, teniendo en cuenta que "American Sniper" se queda muy por detrás de la primera en cuanto a profundidad psicológica y de la segunda en cuanto a nervio e intensidad narrativa, puede suponerle un handicap importante de cara a conseguir un galardón al que no le gusta repetir temática con tan poco margen de fechas.

Una opinión personal: el tono hagiográfico y maniqueo convierte al film en un ejemplo de propaganda republicana difícil de digerir. Tampoco encuentro en ella nada innovador ni sorprendente. De hecho, ni siquiera me parece entretenida. Por consiguiente, ni todas las virtudes técnicas de la película (que las tiene) ni la correcta interpretación del sobrevalorado Bradley Cooper (nominado por tercer año consecutivo) justifican su plaza en la carrera por el galardón a mejor película. En lo que a mí respecta, "American Sniper" es la mayor decepción de estos Oscars.

¿VereGIFto?



Birdman, o la inesperada virtud de la ignorancia (Birdman, or the Unexpected Virtue of Ignorance)


De qué va: Riggan Thomson, un actor encasillado en el personaje de un super-héroe al que interpretó en la gran pantalla hace más de dos décadas, pretende recuperar el rumbo de su carrera y de su propia vida produciendo, dirigiendo y protagonizando en Broadway una adaptación de un relato de Raymond Carver.

A qué está nominada: 9 candidaturas: película, director (Alejandro González Iñarritu), actor principal (Michael Keaton), actor de reparto (Edward Norton), actriz de reparto (Emma Stone), guión original, fotografía, sonido y efectos sonoros.

Puntos fuertes: un reparto en estado de gracia, con Keaton interpretando el mejor papel de su carrera y Norton componiendo un antagonista narcisista inolvidable. La osadía técnica de rodar todo el film como un solo plano secuencia (qué más da que esté falseado, también eso es parte de la magia del cine), rizando el rizo narrativo hasta niveles orgásmicos.

Puntos débiles: se trata de una película exigente y poliédrica, con varios niveles de lectura (dramático, satírico, trágico, cómico, metalingüístico) y muy alejada del tipo de narración más convencional que suele gustar a los académicos.

Una opinión personal: "Birdman" es el triple mortal sin red que tanto Michael Keaton como Alejandro González Iñarritu necesitaban para reconducir sus respectivas carreras: un liberador ejercicio de autocrítica (el actor encasillado al que nadie toma ya en serio, el director egomaníaco que enfanga su trabajo con infinitas ambiciones filosófico-existenciales) y de crítica al show business (el cine, el teatro, la crítica profesional, la fama y sus consecuencias, el impacto de la celebridad en las redes sociales) envuelto en un experimento narrativo de hibridación entre cine y teatro tan arriesgado y pretencioso como los contenidos contra los que la propia película arremete. "Birdman" es González Iñarritu jugando a ser Brian de Palma dirigiendo un guión de Charlie Kaufman... o el mind-blowing más bestia que recuerdo haber vivido en un cine desde que Paul Thomas Anderson estrenase "The Master".

¿VereGIFto?



Boyhood: momentos de una vida (Boyhood)


De qué va: la vida de Mason, un muchacho cualquiera, desde los 6 años hasta los 18.

A qué está nominada: 6 candidaturas: película, director (Richard Linklater), actor de reparto (Ethan Hawke), actriz de reparto (Patricia Arquette), guión original y montaje.

Puntos fuertes: es una de las grandes favoritas y en los últimos meses se ha hinchado a recibir premios: de las asociaciones de críticos de Nueva York, Los Angeles y Chicago, del Festival de Berlín, del gremio de actores, de los Globos de Oro... Su eficaz campaña de marketing ha conseguido generar bastante revuelo en torno a su inusual proceso de gestación (se rodó durante 12 años, con su reparto creciendo y envejeciendo ante la cámara), lo cual le ha otorgado un halo de culto desde antes incluso de su estreno comercial. La filmografía de Richard Linklater, que incluye algunos títulos muy bien recibidos por la crítica (como la trilogía "Antes de..."), está pidiendo a gritos el reconocimiento de la Academia, y ésta parece la ocasión propicia.

Puntos débiles: es una candidata muy sólida y, más allá de lo competitivas que puedan ser otras nominadas, no manifiesta ningún aspecto particularmente oscuro que pueda disuadir a los académicos a la hora de premiarla.

Una opinión personal: "Boyhood" es un film vocacionalmente cotidiano, con un argumento anecdótico, que sin embargo demuestra una capacidad de empatía prodigiosa en su evocación de la infancia y adolescencia y en su magnífico reflejo del paso del tiempo. El viaje personal de Mason conecta profundamente con mis vivencias personales (bien como protagonista de mi propia juventud, bien como testigo de la de mis allegados) y logra despertarme una profunda implicación en la narración. No siendo mi candidata favorita a mejor film, no me cabe la menor duda de que se trata de una película muy buena.

¿VereGIFto?



El gran hotel Budapest (The Grand Budapest Hotel)


De qué va: "El gran hotel Budapest" traslada al espectador a la ficticia república europea de Zubrowka, durante el período de entreguerras, para narrar las aventuras de Zero, mozo de los recados, y su mentor el Sr. Gustave, conserje en el edificio que da nombre al film.

A qué está nominada: 9 candidaturas: película, director (Wes Anderson), guión original, montaje, fotografía, banda sonora, dirección artística, vestuario y maquillaje.

Puntos fuertes: la arrolladora personalidad de su director, Wes Anderson. Un reparto estelar capitaneado por un Ralph Fiennes inconmensurable. En los Globos de Oro se impuso a otra de las grandes favoritas, "Birdman", en la categoría de mejor comedia o musical.

Puntos débiles: la arrolladora personalidad de Anderson puede ser demasiado "personal" y "autoral" para algunos de los académicos, que ya sabemos que son unos septuagenarios rancios que reniegan de cualquier cosa que huela a posmoderno. Las comedias suelen tenerlo complicado en los Oscars. Fiennes no está nominado como mejor actor: ¡buu, Villarato!

Una opinión personal: resulta difícil hacer justicia en este breve párrafo al incesante despliegue de imaginación, talento y puro ingenio que se sucede ininterrumpidamente durante los fugaces 100 minutos en los que “El Gran Hotel Budapest” consigue mantener al espectador con una constante sonrisa dibujada en la cara, cuando no le arranca una sonora carcajada. Su genuino sabor aventurero, más presente aquí que en ninguna otra cinta previa del director, conecta además con los iconos del tebeo francobelga, pasándolos por el tamiz de aquel Ernst Lubitsch capaz de reírse de los totalitarismos sin caer en el error de banalizarlos. Aunque hay que tener en cuenta, por supuesto, que el abajo firmante es un apologista confeso de Anderson, consciente pese a todo de que los infinitos travelings laterales, los encuadres meticulosamente simétricos, la estética vintage de colores estridentes, el delicioso gusto musical y el melancólico humorismo del director de “Academia Rushmore” no son plato del gusto de todos.

¿VereGIFto?



The Imitation Game: Descifrando Enigma (The Imitation Game)


De qué va: durante la II Guerra Mundial, el matemático Alan Turing (un tipo con el raro síndrome de Asperger y la cara aún más rara de Benedict Cumberbatch) descifra el código Enigma que los alemanes empleaban para enviar mensajes criptográficos. Oh, spoiler.

A qué está nominada: 8 candidaturas: película, director (Morten Tyldum), actor principal (Cumberbatch), actriz de reparto (Keira Knightley), guión adaptado, montaje, banda sonora y dirección artística.

Puntos fuertes: Bondercut Cummingbitch. Él es la película. Y si no la has visto en V.O. entonces has visto otra peli distinta porque, sweet baby jesus, menuda voz tiene el futuro Doctor Strange de Marvel Studios.

Puntos débiles: "The Imitation Game" es esa película de estreno que inevitablemente ya hemos visto antes: como un mash up prefabricado de "Una mente maravillosa" con unas gotas (mínimas) del espionaje british de "El topo" y el sentido histórico (también muy british) de "El discurso del rey".

Una opinión personal: no es que "The Imitation Game" sea mala. De hecho, tiene unas cuantas virtudes importantes, empezando por el rol protagonista de Ben Cucumberdick. Pero uno la percibe tan irrelevante (desde el punto de vista cinematográfico) y tan for your consideration que acaba viéndola con cierto interés pero también una distancia y una tibieza inevitables. En mi opinión con las nominaciones a Camembertbutt y a Alexandre Desplat (por la BSO) iba que chutaba. Lo de Keira Knightley es de coña.

¿VereGIFto?



Selma


De qué va: reconstrucción de la lucha de Martin Luther King para promover el derecho al voto de la población afroamericana en EE.UU., que culminó con la gran marcha pacífica en el estado de Alabama, desde Selma hasta Montgomery.

A qué está nominada: 2 candidaturas: película y canción (“Glory”).

Puntos fuertes: "Selma" es una película que huele a Oscar desde el minuto 1. Posee un reparto espléndido, capitaneado por un inmenso David Oyelowo, que además reúne un buen puñado de rostros conocidos del cine (Tom Wilkinson, Giovanni Ribisi, Tim Roth, Martin Sheen, Cuba Gooding Jr.) y la televisión (Wendell Pierce, André Holland, el rapero Common y la todopoderosa Oprah Winfrey); se basa en unos acontecimientos fundamentales de la historia moderna de los EE.UU.; trata un tema (la segregación racial) que sigue muy vigente en la actualidad y posee la inteligencia de hacer digerible para el gran público su mensaje político y social acompañándolo de un retrato de personajes cercano.

Puntos débiles: por razones que se me escapan, "Selma" sólo está nominada en dos categorías (película y canción original), con lo que sus posibilidades reales de obtener una estatuilla son mínimas. Y en caso de hacerlo, será sin duda para el tema compuesto por Common y John Legend (que además es mi favorito, con diferencia, de entre los 5 nominados):


Una opinión personal: maltratada de forma llamativa en las nominaciones, "Selma" me parece el biopic más potente de los que se postulan este año a mejor película. Y ni siquiera es un biopic al uso: del mismo modo en que Spielberg enfocó su "Lincoln" como un capítulo autocontenido en la biografía del decimosexto presidente de los EE.UU., Ava DuVernay se centra en un período concreto de la vida de Martin Luther King, restando protagonismo a su trágico destino y otorgándoselo a su importantísimo legado político y social. Las enseñanzas de King, magníficamente interpretado por Oyelowo (imprescindible, para variar, ver la película en V.O.) siguen siendo hoy en día igual de educativas e inspiradoras que en 1965, lo cual convierte a "Selma" en uno de esos films (como "Milk" o "American History X") cuyo visionado debería ser obligatorio en institutos y escuelas secundarias.

¿VereGIFto?



La teoría del todo (The Theory of Everything)


De qué va: biopic sobre el matrimonio de Jane Wilde con el eminente astrofísico Stephen Hawking, enfermo de esclerosis e icono de la cultura popular por derecho propio.

A qué está nominada: 5 candidaturas: película, actor principal (Eddie Redmayne), actriz principal (Felicity Jones), guión adaptado y banda sonora.

Puntos fuertes: dos intérpretes protagonistas, Redmayne y Jones, absolutamente deslumbrantes. El personaje principal es uno de los divulgadores científicos más conocidos del mundo, y la Academia podría cometer el desliz de premiar al film por sus simpatías hacia el Hawking real. En lugar de indagar en el trabajo del astrofísico, "La teoría del todo" pretende arrojar luz sobre su vida personal; lo cual, por supuesto, convierte al film en un drama de personajes mucho más asequible para el común de los espectadores.

Puntos débiles: más allá del espectacular trabajo interpretativo, "La teoría del todo" es una película simplemente cumplidora en términos narrativos. De ahí, claro, que no esté nominada ni a mejor director ni en las categorías técnicas que, muchas veces, son llave a la hora de optar a la estatuilla a mejor película.

Una opinión personal: pese al punto de partida de su argumento, "La teoría del todo" nunca se hunde en los abismos de la pornografía emocional, lo cual es muy de agradecer. Los dos protagonistas están espléndidos y, aunque es posible que él se lleve casi todos los elogios (las composiciones tan físicas es lo que tienen), ella es quien realmente carga con el peso dramático de la película. Sé que muchos espectadores agradecerán la ligereza del film en términos científicos, pero yo echo en falta una explicación, por mínima que sea, de por qué las teorías de Hawking han ampliado el conocimiento que el ser humano tiene del universo: al fin y al cabo, este señor es una celebridad entre la comunidad científica internacional por sentar cátedra al hablar sobre agujeros negros, antimateria y las propiedades físicas del tiempo, y no por estar recluido en una silla de ruedas. También echo de menos algo de atrevimiento formal, más allá de una banda sonora bonita y una fotografía demasiado pastel para mi gusto. Pero a pesar de todo ello, al final son Redmayne, Jones y un guión poco sorprendente pero sí muy eficaz quienes acaban imponiéndose: aún con sus carencias, "La teoría del todo" bien merece un visionado.

¿VereGIFto?



Whiplash


De qué va: Andrew es un joven baterista de jazz que quiere despuntar en el elitista conservatorio en el que estudia. El camino para lograrlo es llamar la atención de Terence Fletcher, un profesor conocido por dirigir a la mejor banda de jazz del conservatorio y, sobre todo, por sus salvajes métodos de enseñanza.

A qué está nominada: 5 candidaturas: película, actor de reparto (J.K. Simmons), guión adaptado, montaje y sonido.

Puntos fuertes: J.K. Simmons lo parte como el profesor psicópata que empuja a sus alumnos al abismo; salvo sorpresa de última hora, el Oscar a mejor actor secundario será suyo. Miles Teller, futuro Reed Richards en la controvertida adaptación de "Los Cuatro Fantásticos" que Fox está llevando a cabo, hace un esfuerzo increíble por estar a la altura de su partenaire y, milagro, sale airoso del desafío. El sentido del ritmo del film, basado en un montaje milimétrico, produce sensaciones muy intensas en las escenas musicales.

Puntos débiles: "Whiplash" es la perfecta película del circuito independiente, pero quizás sea demasiado pequeña e independiente según los estándares de la Academia, que suele premiar films con un perfil más generalista y grandilocuente. El joven director Daniel Chazelle no está nominado en la categoría correspondiente, lo cual supone un obstáculo importante en las aspiraciones a lograr la estatuilla a mejor película. Parece claro que J.K. Simmons recibirá el Oscar por su interpretación, pero también que ése será el único premio que "Whiplash" se lleve del Kodak Theatre el próximo 22 de febrero.

Una opinión personal: tal vez "Whiplash" no sea la mejor película del año (queda mucho año y muchas películas), pero sí me parece una que acierta en cada nota que toca. Funciona de manera excepcional como retrato de y conflicto entre personajes, como relato de crecimiento del protagonista, como ejercicio musical (el montaje, de una precisión rítmica hipnótica, se revela aquí fundamental) y hasta como thriller de alta tensión. Posee además dos interpretaciones magistrales, que atrapan la mirada del espectador como un agujero negro succiona la luz, y tiene la rara virtud de permitir que el espectador saque sus propias conclusiones sobre el argumento al encenderse las luces y abandonar la sala. Oh, y además no es preciso saber absolutamente nada de jazz para disfrutarla. Total, que no es necesario que un film sea perfecto para ser redondo.

¿VereGIFto?



Algunas multinominadas que he podido ver...

Además de las 8 nominadas a mejor película, existen varias cintas que aspiran a más de una estatuilla en la próxima entrega de los Oscars:

Foxcatcher


De qué va: "Foxcatcher" narra la turbia relación entre los hermanos Schultz, medallistas olímpicos de lucha grecorromana, y el excéntrico multimillonario John Du Pont, mecenas del equipo estadounidense de lucha. Basada en hechos reales, y tal.

A qué está nominada: 5 candidaturas: director (Bennett Miller), actor principal (Steve Carell), actor de reparto (Mark Ruffalo), guión original y maquillaje.

Puntos fuertes: tres actores protagonistas dándolo todo en sus respectivos papeles (aunque Channing Tatum se haya quedado sin nominación). Un sentido del encuadre virtuoso, reconocido con la nominación a Bennett Miller, excelente director de actores que ya compitió por la estatuilla en 2006 por "Capote".

Puntos débiles: Mark Schultz, la persona real en la que se basa el personaje de Tatum, ha arremetido públicamente contra el film, acusándolo de pasarse los hechos por el forro y de ofrecer una imagen degradante de su persona. Por otro lado, cuando una cinta compite en las categorías de dirección, actores y guión pero no en la de mejor película, algo falla. Lo más probable es que se trate de una cinta demasiado oscura, pesimista y poco comercial para los gustos de los académicos. Y que al final se vaya de vacío.

Una opinión personal: "Foxcatcher" no es una película deportiva; tampoco un biopic al uso. Es un retrato patético y desasosegante de unas psicologías heridas y enfermas asociadas por azar al mundo de la alta competición. Pese a la temática, le encuentro más similitudes con (la muy inferior) "Capote" que con "Moneyball", la supuesta cinta de beisbol de Miller que tampoco era una película sobre deportes en sentido estricto (y que me había parecido la mar de maja). "Foxcatcher" es densa, fría y despiadada, con una progresión del mal rollo sutil, casi imperceptible: te pasas media película pensando que no está ocurriendo nada del otro jueves, pero sintiendo una opresión en el pecho que va creciendo hasta el ¿clímax? ¿anticlímax? final. Y luego están esos tres actores (Tatum, Ruffalo y Carrell), menospreciados durante buena parte de sus respectivas carreras y asociados a un tipo de papeles que aquí se sacuden de encima en apenas un par de escenas. A mí me ha gustado mucho, y me parece superior a varias de las nominadas a mejor película.

¿VereGIFto?



Interstellar


De qué va: mientras nuestro planeta agoniza, un astronauta llamado Cooper abandona a su familia y se lanza en un viaje suicida hacia las estrellas para encontrar nuevos mundos habitables para la raza humana.

A qué está nominada: 5 candidaturas: banda sonora, dirección artística, sonido, efectos sonoros y efectos visuales.

Puntos fuertes: pese a su exigente lenguaje de ciencia-ficción, "Interstellar" ha sido uno de los 10 films más taquilleros del año pasado y ha encumbrado aún más a su director (Christopher Nolan, bastante discutido tras la decepción de "The Dark Knight Rises") y a su protagonista (Matthew McConaughey, que tuvo un 2014 glorioso). Ha generado debates en la red, dividido a la crítica y al público y acaparado infinidad de titulares, algunos de naturaleza cinematográfica y otros puramente científicos.

Puntos débiles: pese a las nominaciones técnicas (en las que tiene una competencia muy dura), la Academia sigue demostrando su desprecio hacia el cine de Christopher Nolan, negándole a "Interstellar" la posibilidad de competir en categorías tan importantes (y yo creo que merecidas) como las de director, montaje y película. Se lleve lo que se lleve del Kodak Theatre, me parecerá poco.

Una opinión personal: quienes llevan años criticando la ausencia de sentimiento en el cine de Christopher Nolan tendrán que envainársela tras el estreno de “Interstellar”. Contra todo pronóstico, el homérico viaje espacial de Matthew McConaughey te golpea emocionalmente como un tren de mercancías. Puede que el cosmos sea un erial frío y desolado, pero lo que late en las entrañas del film es algo mucho más cálido y humano: el sacrificio infinito, como el universo, que un padre puede llegar a hacer por sus hijos. El gélido trabalenguas espacio-temporal que Nolan pone en boca de Michael Caine tiene su reverso más visceral en la defensa que el personaje de Anne Hathaway hace del amor como variable cuántica, y lo que uno acaba llevándose a casa al terminar la película no es tanto el hiperbólico ejercicio de supervivencia en gravedad cero (que sí, es fascinante e hipnótico) como el drama de un padre destinado a perder a sus hijos para poder asegurarles un futuro. Eso es algo con lo que cualquiera puede conectar (cualquiera que quiera un poco a su familia y trate de imaginarse lo que supondría tener que renunciar a ella para siempre), y es de ahí precisamente de donde emana la fuerza gravitacional que mantiene a la última propuesta de Nolan con los pies bien pegados a la Tierra (metafóricamente hablando) y al espectador con la mandíbula apretada y los ojos vidriosos durante las casi tres horas de metraje.

¿VereGIFto?



Into the Woods


De qué va: crossover entre diferentes cuentos de los hermanos Grimm (Wilhelm, Jacob y Benjamin) y "Jack y las habichuelas mágicas". Adaptación del musical de Broadway de James Lapine y Stephen Sondheim.

A qué está nominada: 3 candidaturas: actriz de reparto (Meryl Streep), dirección artística y vestuario.

Puntos fuertes: Meryl Streep rapeando, o casi, en su primera intervención. La señora tiene abono vitalicio para los Oscars y posiblemente su nominación anual le llegue por correo electrónico desde un bot. Que Johnny Depp salga sólo minuto y medio (¿no estáis harrrrtos de él?).

Puntos débiles: lo indefinido de su tono: sabemos que es un musical, sí, pero ¿es además una comedia, un drama, una parodia?. Su fidelidad a la versión teatral le impide desarrollar soluciones cinematográficas propias que habrían mejorado mucho el resultado final. El modo en que el film se parte en dos transcurrida la primera hora, cargándose el ritmo, la trama y el interés del abajo firmante. Su puesta en escena, tan alabada por la crítica, me resulta empalagosamente cursi... casi tanto como la cara y el tupé de Chris Pine (¿el nuevo Rob Lowe?). Además, toda la parte de los gigantes es tan cutre que cuesta imaginar a dónde han ido a parar los 50 millones del presupuesto.

Una opinión personal: tras una prometedora presentación de personajes (de lejos, la mejor escena de la película), "Into the woods" se convierte en una cinta simplemente visible en su primera hora y directamente bochornosa en los 60 interminables minutos restantes. El equipo dirigido por Rob Marshall debería contentarse si al acabar la noche consigue sacar del Kodak Theatre algunos canapés en un tupperware. Sólo para talibanes de los musicales o fans obsesivos de Meryl Streep Fighter.

¿VereGIFto?



Guardianes de la Galaxia (Guardians of the Galaxy)


De qué va: abducido por alienígenas siendo todavía un niño, Peter Quill se convierte en un cazarrecompensas intergaláctico obsesionado con la cultura pop terrestre de los años 70 y 80. En su camino por conseguir un mcguffin con forma de Gema del Infinito conocerá a cuatro excéntricos aliados: la implacable asesina Gamora, el bárbaro y descerebrado Drax, el peluche hiperviolento Rocket y un vegetal antropomórfico de pocas palabras llamado Groot. Adaptación a la gran pantalla de unos personajes poco conocidos de Marvel Comics.

A qué está nominada: 2 candidaturas: efectos visuales y maquillaje.

Puntos fuertes: ha sido uno de los blockbusters del verano, encandilando al público y a una parte de la crítica (no esos críticos que babean con lo último de Goddard, sino los que crecieron, igual que Peter Quill, adorando el cine fantástico de los 80).

Puntos débiles: aunque las categorías en las que compite no requieren de la "trascendencia" que sí se presupone en otro tipo de nominadas, el hecho de no tomarse jamás en serio a sí misma podría echar para atrás al sector más rancio de la Academia.

Una opinión personal: cachondeo sanísimo y carente de pretensiones (más allá de reventar la taquilla, claro), "Guardianes de la Galaxia" es un homenaje nada disimulado hacia un tipo de cine aventurero y un poco payaso que recorre el sendero que lleva desde los templos tribales de "En busca del Arca Perdida" hasta el polvoriento universo creado por Joss Whedon en "Firefly". Una película para acompañar con una generosa ración de palomitas y coca-cola, encendiendo el piloto automático de las risas y de la épica pulp/pop/trash.

¿VereGIFto?



Ida


De qué va: Polonia, años 60. Anna es una joven novicia que ha vivido desde siempre en un convento católico. Antes de tomar los votos y hacerse monja, la madre superiora la envía a conocer a su tía. Ella será quien le revele su verdadero nombre, Ida, y sus raíces judías.

A qué está nominada: 2 candidaturas: película de habla no inglesa y fotografía.

Puntos fuertes: reconocida como mejor película, director y guión en los Premios del Cine Europeo y habiendo encandilado a las asociaciones de críticos de Nueva York y Los Angeles, "Ida" es la candidata con más opciones a la hora de alzarse con el Oscar al mejor largometraje de habla no inglesa. El hecho de que cuente además con otra nominación (indiscutible) a mejor fotografía refuerza su condición de favorita, por mucho que "Leviatán" (la candidata rusa, muy crítica con el régimen de Vladimir Putin) llegue impulsada por un contexto político favorable.

Puntos débiles: a decir verdad, no se me ocurre ningún motivo por el que "Ida" no deba alzarse con la estatuilla a mejor película de habla no inglesa. "Relatos salvajes" me pareció divertidísima, pero dada la abrumadora belleza plástica del film de Pawel Pawlikowski, no dudo de que el Oscar acabará viajando a Polonia.

Una opinión personal: la película más pequeña de estos Oscars (blanco y negro, duración inferior a 80 minutos, formato de 4:3 y 99% de las escenas filmadas con plano fijo) es también una de las más impactantes. Sus imágenes, instantáneas perfectas salidas de otro tiempo (pensad en Dreyer, en Bergman), se agarran a la retina y transmiten, a pesar de su aparente frialdad, una gama muy amplia de emociones en conflicto: fe, represión, sensualidad, muerte, catarsis... "Ida" es una película compleja narrada de forma sencilla. Un triunfo del encuadre, de la composición del plano. Una obra muy hermosa.

¿VereGIFto?




...y otras multinominadas que no he visto

Todos los años intento ver todas las películas con más de una nominación... y todos los años se me escapa alguna. En esta ocasión me han faltado 4 (¡4!) películas por visionar. Ninguna es una de las grandes favoritas en las categorías en que compite, pero uno nunca puede estar seguro al 100% de dónde van a terminar cayendo los premios.

Mr. Turner


De qué va: biopic del pintor inglés J.M.W. Turner.

A qué está nominada: 4 candidaturas: fotografía, banda sonora, dirección artística y vestuario.

Puntos fuertes: Mike Leigh no es un nombre excesivamente conocido entre el público, pero goza de gran prestigio entre la crítica y los cinéfilos de pro. Las biografías de los pintores parten con una ventaja importante en el aspecto visual: en ellas late un universo de colores y texturas deseando ser llevado a la gran pantalla; cuando se hace bien, el acierto es monumental.

Puntos débiles: su condición de cine culto (que no de culto), su ambientación de época y su carácter eminentemente británico pueden dejar fríos a los académicos.

¿Por qué no la he visto?: estrenada en España en plena temporada navideña, un biopic de dos horas y media sobre un maestro del paisajismo del siglo XIX no es precisamente el plan vacacional más estimulante. ¿"El Hobbit"? Vale. ¿"Big Hero 6"? Por supuesto, ¿"Mr. Turner"? Eeeeeh... Y luego, claro, uno lo va dejando y el resto de estrenos llegan y se imponen. Reconozco que me apetece verla, pero no está entre mis prioridades inmediatas.


Invencible (Unbroken)



De qué va: Louis Zamperini, ex-atleta olímpico alistado durante la II Guerra Mundial en las Fuerzas Aéreas de EE.UU., es capturado por las tropas japonesas tras el naufragio de su bombardero en aguas del Pacífico #trustory

A qué está nominada: 3 candidaturas: (fotografía, sonido y efectos sonoros).

Puntos fuertes: en base a sus nominaciones, le presupongo un acabado técnico notable. Aparte de eso, el otro elemento llamativo es el hecho de que su directora sea Angelina Jolie y que el libreto venga firmado por los mismísimos hermanos Coen.

Puntos débiles: la cinta ha tenido un recibimiento tibio por parte de crítica y público y su argumento huele a hagiografía oscarizable por todas partes.

¿Por qué no la he visto?: teniendo en cuenta el nombre de su directora, las críticas de la prensa especializada y las opiniones de algunos conocidos, he desarrollado una pereza de dimensiones planetarias hacia "Invencible". Igual me estoy perdiendo una película interesante, pero no tengo ganas de descubrirlo.


Alma salvaje (Wild)


De qué va: para encontrar sentido a su vida y hallar su lugar en el mundo, una mujer decide recorrer a pie los 1.600 kilómetros que conforman el Sendero de las Cimas del Pacífico, en el desierto de Mojave. Basada en la autobiografía de Cheryl Strayed.

A qué está nominada: 2 candidaturas: actriz principal (Reese Witherspoon) y actriz de reparto (Laura Dern).

Puntos fuertes: su director, Jean-Marc Vallée, vive un momento dulce de aceptación por parte de la crítica tras el éxito, el año pasado, de "Dallas Buyers Club". Tras conseguir una estatuilla por "En la cuerda floja", Reese Witherspoon continúa buscando papeles que le ayuden a demostrar su calidad interpretativa. De todos modos, las probabilidades de que el film consiga algún Oscar provienen de la nominación a Laura Dern, actriz con halo de culto (es una de las musas de David Lynch) que no aspiraba al premio desde 1992 (por "El precio de la ambición").

Puntos débiles: el año pasado los Oscars a mejor actor y mejor actor de reparto recayeron en una película de Vallée (la mentada "Dallas Buyers Club", protagonizada por Matthew McConaughey y Jared Leto), con lo cual es difícil que la situación vuelva a repetirse este año por el lado femenino. Como en tantos otros casos, las posibilidades reales de "Alma salvaje" para alzarse con alguna estatuilla parecen ínfimas, y es probable que los académicos entiendan que las nominaciones son, en sí mismas, todo el reconocimiento que la película merece.

¿Por qué no la he visto?: en realidad sí he visto un trozo de la película, los primeros 20 minutos, pero estaba cansadísimo (acababa de terminar "Into the Woods", ¡qué fatiga!) y no me estaba enganchando demasiado, así que decidí dejarla para otro momento en el que pudiese cogerla con más ganas. Ese momento aún no ha llegado y, dada mi agenda ociopática para las próximas semanas, es posible que no vaya a llegar en breve. Veremos.


Puro vicio (Inherent Vice)


De qué va: adaptación de una novela del escritor de culto, con fama de difícil, Thomas Pynchon. Seguro que tú tampoco has leído nada suyo, pero igual te suena si te digo que era ése que salía en "Los Simpson" con una bolsa de papel en la cabeza. ¿Ves como sí? El caso es que su protagonista es un detective privado con pinta de friki enredado por su ex-novia en una trama de fraudes inmobiliarios y colocones de LSD. Sobre el papel, suena como "Chinatown" protagonizada por el Nota de "El Gran Lebowski".

A qué está nominada: 2 candidaturas: guión adaptado y vestuario.

Puntos fuertes: Paul Thomas Anderson (o PTA): el director y guionista al que los Oscars deben 18 años de reconocimientos. Un gran reparto encabezado por Joaquin Phoenix, el tipo que pasó de ser "el hermano leporino de River Phoenix" a convertirse en "uno de los mejores actores del mundo" a base de bordar buenos papeles en proyectos interesantes con directores de prestigio.

Puntos débiles: los fanses de PTA ya estamos acostumbrados a que la Academia ignore sistemáticamente todas y cada una de sus películas. Las nominan lo mínimo, y rara vez las premian. En una filmografía tan abrumadora como la suya, los dos Oscars de "There Will Be Blood" (AKA "Pozos de Ambición" AKA "Lo que se le ocurra esa mañana al traductor de turno") saben a poco, y los desplantes a "Boogie Nights", "Magnolia" y "The Master" suenan directamente a pitorreo. Así que uno ya asume que "Inherent Vice" se irá de vacío del Kodak Theatre por venir de quien viene e ir destinada a quien va destinada. Y todo esto lo digo como un apriorismo puro y duro: sin haberla visto, vaya.

¿Por qué no la he visto?: la Academia no ha tenido a bien mandarme una copia "for my consideration" de la nueva película de PTA. Qué descaro, ¿verdad? Teniendo en cuenta que en España se estrena en marzo, a estas alturas lo único que puedo decir de "Inherent Vice" es que tengo muchas (pero muchas) ganas de verla.


Mi quiniela personal

La porra que viene a continuación no refleja mis preferencias, sino lo que creo que decidirán los académicos: dos cosas bien distintas.



Mejor película

"Boyhood"

Mejor director

Richard Linklater (por "Boyhood")

Mejor actor principal

Michael Keaton (por "Birdman")

Mejor actriz principal

Felicity Jones (por "La Teoría del Todo")

Mejor actor de reparto

J.K. Simmons (por "Whiplash")

Mejor actriz de reparto

"Patricia Arquette" (por "Boyhood")

Mejor película animada

"Cómo entrenar a tu dragón 2"

Mejor guión original

"Boyhood"

Mejor guión adaptado

"La Teoría del Todo"

Mejor película de habla no inglesa

"Ida"

Mejor diseño de producción

"El Gran Hotel Budapest"

Mejor fotografía

"Birdman"

Mejor vestuario

"El Gran Hotel Budapest"

Mejor montaje

"Boyhood"

Mejores efectos visuales

"El Amanecer del Planeta de los Simios"

Mejor maquillaje

"El Gran Hotel Budapest"

Mejor edición de sonido

"Interstellar"

Mejores efectos sonoros

"Interstellar"

Mejor banda sonora

"La Teoría del Todo"

Mejor canción

"Glory" (de "Selma")

Mejor documental

"Citizenfour"

Mejor cortometraje

"Boogaloo and Graham"

Mejor cortometraje documental

"White Earth"

Mejor cortometraje animado

"The Bigger Picture"

domingo, febrero 08, 2015

Viñetas de invierno

En pleno febrero, las inclemencias del tiempo imponen una dedicación a los placeres domésticos entre los que destaca, en mi caso, el disfrute de cuanto tebeo caiga en mis manos. Son, en parte, lecturas aún pendientes de la cosecha navideña, pero también algunos de los más recientes lanzamientos de Norma, Panini, ECC o Planeta:

American Vampire 7
Guión: Scott Snyder. Dibujo: Rafael Albuquerque y Matías Bergara.
ECC Ediciones. Disponible en rústica y cartoné. 128 págs.


Comienza en España el "Segundo ciclo" de la saga vampírica que Scott Snyder y Rafael Albuquerque publican dentro de la línea Vertigo, y yo aprovecho que en esta ocasión mi implicación en la edición española es nula para enunciar unas breves impresiones sobre el tebeo. El hecho de que "American Vampire" sea, junto con "Fábulas", el título más exitoso en la actualidad de la línea para adultos de DC Comics es sintomático de las horas bajas del sello. Es cierto que las correrías de Skinner Sweet y Pearl Jones a lo largo del siglo XX estadounidense vuelan muy por encima de las descafeinadas fantasías de Bill Willingham, pero también lo es que están lejos del nivel del que Vertigo podía presumir hace unos años, cuando escritores como Grant Morrison, Garth Ennis, Warren Ellis, Brian K. Vaughan, Jason Aaron, Brian Azzarello, Matt Wagner o el mejor Peter Milligan que se recuerde hacían cola para dar salida a esas historias de creación propia que ahora la mayoría prefiere publicar bajo el paraguas de Image Comics.


Hay cosas de "American Vampire" que me gustan mucho: su concepción de la Historia en dos niveles (el que ha quedado registrado por la humanidad ignorante y el subterráneo, en el que cada giro de los acontecimientos ha estado relacionado con las conspiraciones de los nosferatu y de los Vasallos del Lucero del Alba), su visión darwinista del fenómeno vampírico (con razas adaptadas a las condiciones de cada ecosistema y zona geográfica, dando lugar a la mayoría de leyendas sobrenaturales conocidas), el trazo espectacular de Rafael Albuquerque... pero creo que Scott Snyder tiene más talento para los planteamientos que para los resultados. Muchas veces echo en falta una mayor sutileza en sus guiones para "American Vampire": entiendo que su propuesta debe tener acción y diálogos lapidarios para contentar a un sector del público que reclama su ración mensual de violencia y poses molonas, pero por el camino Snyder casi siempre sacrifica las posibilidades dramáticas de los personajes y las virtudes del contexto histórico en pos de la pirotecnia (todo lo contrario a lo que hace Ed Brubaker en "Fatale", de la que hablo en esta misma entrada). No quisiera ser injusto: "American Vampire" es un tebeo muy entretenido y bien dibujado; lo que pasa es que su buena prensa me parece exagerada, y me chirría que una obra de estas características merezca una doble edición española (simultáneamente en rústica y cartoné) cuando títulos bastante más meritorios como "Zero" o "Locke & Key" posiblemente hayan pasado desapercibidos para buena parte de su público potencial.



Este del Oeste 2 
Guión: Jonathan Hickman. Dibujo: Nick Dragotta.
Norma Editorial. Rústica. 144 págs.


La segunda entrega en castellano del western futurista apocalíptico ucrónico místico de ciencia-ficción de Jonathan Hickman y Nick Dragotta amplía el universo presentado en el volumen anterior y permite que el lector vaya familiarizándose con los distintos territorios que conforman la Norteamérica de "Este del Oeste". La trama política se espesa mientras los gobernantes de las 7 naciones juegan a los tronos y establecen alianzas ocultas para conseguir que, dependiendo de sus propios intereses, el profético Mensaje se cumpla o sea abortado. Además, nuevos personajes entran en acción y otros que se suponían protagonistas pasan a un segundo plano, confirmando la coralidad de la dramatis personae.


A nadie se le escapa que "Este del Oeste" nace con la intención de ser la OBRA DEFINITIVA de Jonathan Hickman. Su guión posee innumerables personajes que compiten unos con otros por ver quién es más molón, diálogos crípticos que esconden más de lo que revelan, un complejo contexto que precisaría de una enciclopedia anotada* para no perderse entre la geografía y la cronología de un mundo aparentemente ilimitado y la promesa de que, en realidad, esto no ha hecho más que empezar. A mí todo lo que rodea a este proyecto me pone un montón, incluyendo, por supuesto, el fantástico arte de Nick Dragotta, capaz de plasmar sobre el papel de la mejor de las maneras todos los desvaríos salidos de la mente de Hickman. Por ponerle un pero a "Este del Oeste" diría que me deja un poco frío en el terreno emocional: todo en ella es absolutamente cerebral, más como un rompecabezas de tramas y subtramas que como un drama donde los personajes se perciban realmente vivos. Pero ésa es una de las constantes en el conjunto del trabajo de Hickman como guionista, y a estas alturas ya no espero que su descripción de caracteres me sorprenda o emocione. Disfruto demasiado con todo lo demás como para considerarlo un error imperdonable, pero sé que a otros lectores sí podría echarles para atrás esta frialdad.


*De hecho esa enciclopedia existe y se titula "The World", pero todavía no ha sido publicada en nuestro país.


Fatale 4: Reza para que llueva
Guión: Ed Brubaker. Dibujo: Sean Phillips.
Panini Comics. Cartoné. 136 págs.


Las semejanzas entre "American Vampire" y "Fatale" pueden parecer superficiales, pero existen: ambas emplean personajes de longevidad sobrenatural para escribir su propia versión del siglo XX estadounidense, saltando de época en cada arco argumental y rellenando los huecos de la historia con capítulos ambientados en tiempos pretéritos. La diferencia estriba en que, mientras Scott Snyder pinta su fresco americano con brocha gorda, Ed Brubaker construye sus personajes y tramas con detallismo y sutileza, nadando entre géneros (serie negra, terror, psycho-thriller, erotismo) para ofrecer un producto tan irresistible como su femme fatale protagonista. Adoro el trabajo conjunto de Brubaker y Phillips, desde "Sleeper" hasta "The Fade Out" (aún inédita en castellano), y "Fatale", a falta de leer el quinto y último tomo, me parece una de sus cimas creativas.


Mientras la trama ambientada en el presente sigue conduciendo al pobre Nicolas Lash por la calle de la amargura, el argumento central de "Reza para que llueva" sitúa al lector en el Seattle de los años 90, donde los integrantes de una decadente banda de grunge acogen en su mansión a una amnésica Josephine. Y como siempre que Josephine aparece en escena, las cosas se lían, los hombres se vuelven locos y mucha gente acaba en el depósito de cadáveres. Entre las inevitables referencias al horror lovecraftiano y a la literatura pulp que Brubaker lleva manejando durante una veintena de episodios se deslizan otras, también evidentes, al zeitgeist de un momento marcado por la trágica muerte de Kurt Cobain, la adicción a las drogas y una actitud bohemia y desencantada que definen perfectamente a los caracteres introducidos por primera vez en este volumen. El auge cinematográfico de la figura del asesino en serie (es la época de "El silencio de los corderos" y de "Seven") se refleja también en otro personaje de gran peso en la trama. Todo ello dibujado una vez más por Sean Phillips, un tipo con un sentido de la narración y de la creación de atmósferas que lo sitúa en las grandes ligas de dibujantes norteamericanos actuales. Está claro que el trazo de Phillips no encaja en colecciones mainstream de acción y capas (ni falta que hace), pero su sinergia con Brubaker en estos relatos de género negro es prodigiosa.



Injustice: Gods among us. Año Uno: Vol. 1
Guión: Tom Taylor. Dibujo: Varios autores.
ECC Ediciones. Rústica. 192 págs.


Resulta muy revelador que la mayoría de tebeos interesantes que publican las dos grandes editoriales estadounidenses (Marvel y DC) sean o bien aventuras de super-héroes de escaso calado mediático (Ojo de Halcón, Daredevil o el Caballero Luna por un lado; Green Arrow, la Cosa del Pantano o Animal Man por el otro) o bien versiones de sus personajes principales liberadas de los lastres de la continuidad y la oficialidad: What if's y Elseworlds. Es precisamente eso, pero a gran escala, lo que Grant Morrison está llevando a cabo en "The Multiversity", el actual título estrella de DC que en España podremos disfrutar a partir de abril, pero también lo que la editorial ha permitido hacer al guionista Tom Taylor en uno de los proyectos coyunturales mejor resueltos que un servidor recuerde. "Injustice: Gods among us" nació como precuela en formato webcomic de un videojuego de lucha al estilo "Mortal Kombat" en el que la plana mayor del Universo DC se zurra de lo lindo, disponible para casi todas las consolas del mercado.


Aunque este tipo de productos me genera una inevitable marea de prejuicios, el inesperado buen hacer de Taylor (que se toma el encargo como si fuese la obra de su vida), sumado a la cantidad de momentos WTF por número (precisamente el mismo tipo de escenas y giros de guión que jamás veríamos en un comic oficial de la Liga de la Justicia), convierten a "Injustice" en la historia de la JLA más disfrutable que haya caído en mis manos desde los tiempos de Morrison al timón de la cabecera. No es que su argumento sea el colmo de la originalidad: una combinación del Superman fascista de "Hijo Rojo" con la proactividad política de títulos como "The Authority" o "Supreme Powers", que justifica una versión oscura y moralmente cuestionable de los buques insignia de la editorial y plantea el escenario idóneo para una guerra entre héroes. Pero Taylor, un auténtico desconocido hasta que puso el pie en esta serie, maneja con soltura el reparto coral, caracteriza con tino a los personajes con apenas tres pinceladas y mantiene al lector atento gracias a un esforzado sentido del cliffhanger. Y lo hace tan bien que casi consigue que un servidor se olvide del frustrante baile de dibujantes que empaña el acabado visual de este primer tomo recopilatorio.



Invencible 20: La muerte de todos
Guión: Robert Kirkman. Dibujo: Ryan Ottley.
Aleta/Dolmen. Rústica. 160 págs.


El trabajo de Robert Kirkman en Image Comics no sólo ha sido fundamental a la hora de cimentar el actual prestigio de la editorial, sino que se cuenta entre los ejemplos más incontestables de coherencia y continuidad creativa de la industria norteamericana. "The Walking Dead" ("Los Muertos Vivientes" en la edición de Planeta) se aproxima en EE.UU. a su número 140 manteniendo en los créditos al dibujante Charlie Adlard, que tomó el relevo de Tony Moore en el lejano capítulo 7. "Invencible", por su parte, ronda ya las 120 entregas, contando en la inmensa mayoría de ellas con los lápices y tintas de Ryan Ottley, inmejorable reemplazo para el creador visual del personaje, Cory Walker, quien cedió su puesto de dibujante titular en el octavo episodio y de vez en cuando reaparece por la cabecera para firmar algunos capítulos de fill-in y portadas alternativas. En España llegamos por fin al redondo episodio 100, incluido en el tomo "La muerte de todos", y uno no puede dejar de maravillarse ante la espectacular calidad media mantenida en la colección durante todos estos años.


Es difícil hacer una reseña de este tomo en particular sin caer en spoilers de los gordos. Cada 4 ó 5 páginas pasa algo nuevo y sorprendente, hasta el punto de que me ha costado elegir un par de imágenes para ilustrar el arte interior sin desvelar demasiado de los giros de su guión. Al igual que ocurrió con el número 100 de "The Walking Dead", Kirkman sabe que tiene algo especial entre manos, pero no deja que la efeméride eclipse al fluir natural del relato y prosigue con su macro-saga super-heroica con el mismo pulso firme y la misma variedad de tramas y tonos desplegados hasta el momento. El guionista incluso se permite una meta-reflexión sobre la importancia relativa de la numeración alcanzada a través del creador de "Science-Dog" (el comic favorito de Mark Grayson, protagonista de "Invencible"), alter-ego ficticio del propio guionista. "La muerte de todos" es otro delicioso cóctel de caracterización precisa, giros calculados de guión, espectacularidad gráfica y acción super-heroica de talla XXL. Una nueva demostración (y ya van...) de que Kirkman es uno de los creadores más inteligentes y en forma de la actualidad, capaz de sacar petróleo de los tópicos del género que maneje en cada ocasión, ya sea el relato post-apocalíptico ("The Walking Dead"), el horror sobrenatural ("Outcast", proximamente en nuestras librerías de la mano de Planeta) o los héroes voladores en mallas de lycra. Mientras la calidad y la frescura se mantengan, yo seguiré coleccionando "Invencible" durante 100, 200 ó 500 números más.



La muerte de Lobezno
Guión: Charles Soule. Dibujo: Steve McNiven.
Panini Comics. 4 cuadernillos grapados de 40 páginas (el primero) y 32 (los siguientes).


Si el "Invencible" de Kirkman y Ottley me parece un ejemplo inmejorable de lo que el género de super-héroes todavía puede dar de sí, el penúltimo evento orquestado por Marvel Comics se sitúa en el extremo opuesto del espectro cualitativo. "La muerte de Lobezno" es una miniserie dedicada, tal y como su título indica, a borrar del mapa al mutante de las garras de adamantium. El motivo es claro, vender, y hacerlo además en dos tiempos: ahora, por supuesto, porque el lector quiere saber cómo la diña uno de los iconos más reconocibles de la (supuesta) Casa de las Ideas, y dentro de un tiempo X (donde X es más de un año pero menos de lo que tarden en estrenar otra película de los Ídem-Men protagonizada por Hugh Jackman), cuando el personaje sea resucitado en otro evento igual de publicitado que meterá una vez más al genio en la botella. A estas alturas ya deberíamos estar insensibilizados a dicha maniobra: Superman, Hal Jordan, Barry Allen, Aquaman, Green Arrow, Thor, el Capitán América e incluso Batman murieron (o algo parecido) en algún momento para resucitar un tiempo después y elevar las ventas de sus respectivas colecciones. ¿Por qué iba el anti-héroe pluriempleado de Marvel a ser menos?


Que las mentes pensantes de la editorial hayan asignado el proyecto a uno de los guionistas de moda (Charles Soule, estrenando contrato en exclusiva con Marvel) y a uno de los dibujantes estrella de la compañía (Steve McNiven, asociado al personaje desde que ilustrase la divertidísima saga de "El viejo Logan") no consigue salvar los muebles. Ni el supuesto oficio del primero ni la espectacularidad del segundo (que en este caso sólo encuentro en el primer episodio) libran a "La muerte de Lobezno" de ser un tebeo ramplón, sin garra (jo jo), con un desarrollo precipitado que, en estos tiempos de decompressive storytelling, no logra en sus escasos cuatro números generar la tensión necesaria antes del clímax, ni transmitir el tono trágico y el hálito épico que hubiera merecido el funesto destino del canadiense favorito del fandom. Tampoco es que importe demasiado: en un par de años volveremos a tener a Lobezno pululando por la mitad de las cabeceras de Marvel Comics como si nada hubiese ocurrido y casi nadie recordará de qué iba todo esto.



The League of Extraordinary Gentlemen.
Nemo: Las rosas de Berlín
Guión: Alan Moore. Dibujo: Kevin O'Neill.
Planeta Cómic. Cartoné. 64 págs.


La segunda aventura en solitario de la hija del Capitán Nemo introduce al lector en el Berlín expresionista de 1941 gobernado por Adenoid Hynkel, el personaje con el que Chaplin parodiaba a Adolf Hitler en "El Gran Dictador". Los Doctores Mabuse y Caligari, acompañados por una versión terrorífica de la María de "Metrópolis" (más cerca de James Cameron que de Fritz Lang) plantarán cara a la heredera del Nautilus en un relato breve marcado por un tono directo de acción y aventuras, en contraste con la densidad y el eclecticismo formal del "Dossier Negro" que Planeta publicó hace apenas unos meses. Aunque habrá quien prefiera esta versión más sencilla y lineal de la obra de Moore y O'Neill, debo reconocer que a mí los álbumes dedicados a Janni Nemo, pese a su innegable carga lúdica, se me antojan los menos extraordinarios de cuantos se han publicado desde que el grupo de Miss Murray y Allan Quatermain comenzase su andadura editorial hace más de 15 años. Incluso el acabado gráfico de O'Neill me parece un par de peldaños por debajo del nivel habitual del dibujante.


Otro pequeño inconveniente es, en mi caso, la necesidad de acudir a internet para encontrar una traducción (al inglés) de la gran cantidad de diálogos que en el tebeo aparecen en alemán (las partes en francés, por suerte, las he ido sacando gracias a mi Erasmus de hace una década en el país vecino). Entiendo que ésa es la forma en que "Las rosas de Berlín" se publicó originalmente, en tres idiomas distintos, pero ya que Planeta nos casca una edición "de lujo" (9 € por un álbum de 60 págs. con tapas duras y tamaño comic-book) bien podía haber añadido un pequeño apéndice que arrojase algo de luz sobre las habilidades políglotas del barbudo de Northampton. Pese a todo, y aún a riesgo de sonar contradictorio, "The League of Extraordinary Gentlemen" me sigue pareciendo un proyecto que se merece todas las alabanzas posibles, interesantísimo incluso en sus capítulos más discretos.



Nowhere Men: Destinos peores que la muerte
Guión: Eric Stephenson. Dibujo: Nate Bellegarde.
Norma Editorial. Rústica. 184 págs.


Como principal responsable editorial de la nueva Image, Eric Stephenson es uno de esos profesionales de la industria del comic al que estaré agradecido de por vida. Además de ser el editor jefe de la compañía y gestionar directamente la publicación de algunos de sus títulos estrella, Stephenson escribe un par de series muy interesantes. Una de ellas es esta "Nowhere Men", cuyos seis primeros números aparecen en España recopilados por Norma Editorial, y que nos transporta a un mundo en el que los científicos de vanguardia (al estilo Tony Stark o Reed Richards) tienen la consideración popular de las estrellas del rock. Los cuatro fundadores de World Corp., una suerte de John, Paul, George y Ringo de la ciencia-ficción, cambiaron el mundo hace décadas, pero sus problemas personales (avaricia, envidia, ego, drogas) los han llevado hasta una situación crítica de la que podría depender el destino del planeta. Ancianos, torturados y enfrentados por sus decisiones pasadas, asediados por el auge de una nueva generación de celebridades pop científicas, se verán obligados a confrontar sus ambiciones personales y profesionales con los dilemas éticos y morales derivados de sus actos.


Stephenson inunda de referencias musicales una trama que bebe en lo conceptual de los trabajos de Jonathan Hickman y Warren Ellis (por su predilección por una ciencia-ficción más sofisticada, alejada de los estándares super-heroicos, y por el retrato ególatra y disfuncional de los genios científicos) y en lo formal de las obras de Alan Moore (con todos esos anexos con entrevistas, carteles publicitarios, extractos de ensayos y biografías, etc). Sin embargo, lo primero que llama la atención de "Nowhere Men" es el fabuloso dibujo de Nate Bellegarde, a años luz de sus colaboraciones previas en algunos spin-of de la serie "Invencible". Bellegarde se luce en los diseños, en la puesta en página y en la expresividad de sus personajes, y hace que los riffs de ciencia-ficción compuestos por Stephenson suenen afilados y pegadizos. Por eso mismo resulta tan triste que la serie haya entrado en un hiato de duración indeterminada a partir del sexto episodio: un parón que el propio Bellegarde atribuye exclusivamente a su propia situación personal. El dibujante reconocía en un largo texto publicado en internet que se encontraba sumido en una profunda depresión (motivada por múltiples circunstancias, entre las que se incluyen su vida sentimental y familiar, el trauma por los atentados de Boston y sus propias tendencias depresivas) para la que estaba tratándose con medicación y terapia, que le impide llevar un ritmo de producción normal. Pese al intento de sustituir al dibujante por otros artistas que puedan sacar adelante el trabajo, Stephenson ha tomado la decisión de esperar lo que sea necesario para que sea Bellegarde quien firme los siguientes episodios de "Nowhere Men". Lo cual, dadas las circunstancias, podría suponer el cierre definitivo de la colección. Una auténtica lástima, tanto en lo que respecta a la salud del dibujante como al futuro del propio tebeo, que nos deja a los lectores con las expectativas por las nubes y la frustración de no saber si algún día llegaremos a disfrutar de nuevas entregas de esta recomendabilísima lectura.



Rachel Rising 1: La sombra de la muerte
Guión y dibujo: Terry Moore.
Norma Editorial. Rústica. 252 págs.


Pese al éxito de series como "Echo" y, sobre todo, "Strangers in Paradise", "Rachel Rising" es mi primer acercamiento a la obra de Terry Moore, uno de esos inusuales Juan Palomo del comic estadounidense (como Jeff Smith o David Lapham en su versión indie) capaces de crearse un nicho de mercado propio, disfrutando de total libertad creativa desde la autoedición y convenciendo a crítica y público de que son autores a seguir hagan lo que hagan. Lo cual, leyendo este primer volumen de "Rachel Rising" publicado por Norma (que no es novedad reciente, de hecho data de 2013 y ya tiene su continuación en las librerías españolas), no debería extrañar a nadie. Porque es, simple y llanamente, un tebeo fabuloso. Con un dibujo limpio, línea clara en blanco y negro, y una puesta en página precisa y elegante, Moore nos narra la historia de Rachel, veinteañera que una mañana despierta bajo tierra a las afueras de Manson, su ciudad natal. Pese a no tener más que fogonazos inconexos de memoria de la noche anterior, no cabe duda de que nuestra chica ha sido asesinada y, sin embargo y por imposible que parezca, está todavía viva. O algo así. A partir de ahí, en compañía de su mejor amiga Jet y de su tía, la trabajadora funeraria Johnny, Rachel tratará de descubrir quién la ha matado, por qué sigue todavía en pie y qué tiene todo ello que ver con una misteriosa mujer rubia que se pasea por las calles de Manson provocando todo tipo de catástrofes.


En lugar de usar este argumento para construir un relato de  horror y misterio al uso, Moore hace gran hincapié en la caracterización de personajes y en las relaciones que se establecen entre ellos, convirtiendo "Rachel Rising" en una suerte de slice of life de ultratumba, no exento de humor y momentos puramente cotidianos que conviven con pasmosa naturalidad con las facetas gore y terrorífica del asunto. El resultado es un comic tan turbador como entrañable, tan intimista como sobrenatural: una combinación ganadora que convierte a Terry Moore en uno de mis nuevos autores (exacto) a seguir y a las siguientes entregas de "Rachel Rising" en compras imperativas. Próxima parada: "Tumbas invernales".



Sam Zabel y la pluma mágica 
Guión y dibujo: Dylan Horrocks.
Editorial Astiberri. Rústica. 228 págs.


Hace unos años Astiberri publicó en España un tebeo titulado "Hicksville" que me robó inmediatamente el corazón. Venía firmado por un tal Dylan Horrocks (un tipo con un nombre pegadizo, mitad poeta y mitad militar británico), y ésa es la única información que necesitaba conocer para tener muchas ganas de leer "Sam Zabel y la pluma mágica": el nombre de su responsable. Horrocks, que compaginó durante un tiempo su carrera como autor independiente con la escritura de guiones para la "Batgirl" de DC Comics, vuelca en el protagonista de su nueva obra sus frustraciones artísticas. Sam Zabel es un dibujante en pleno bloqueo creativo que escribe las aventuras mensuales de una heroína de connotaciones fetichistas llamada Lady Night; un trabajo alimenticio que realiza con desgana y que le ha llevado, en última instancia, a ser incapaz de disfrutar haciendo comics. Sin embargo, la existencia de una misteriosa pluma mágica capaz de introducir a su portador en los universos imaginados en viñetas lo llevará a un viaje metaficcional por los diversos géneros y latitudes de la historieta, desde la space opera al estilo "Flash Gordon" (con un evidente trasfondo de guerra de sexos) hasta el manga de magical girls, pasando por las historias de piratas o las fantasías pobladas por animales antropomórficos. Todo ello, por supuesto, para que tanto Zabel como Horrocks realicen una oda al Noveno Arte y redescubran su amor perdido por los tebeos.


Como ilustrador, Dylan Horrocks se encuentra lejos del talento de su admirado Hergé, pero camufla sus limitaciones gracias a una sensibilidad especial para la narrativa gráfica. "No eres Alan Moore", le dice a Zabel la provocativa Lady Night, una aparición febril en las noches insomnes del protagonista, y pareciera que es el propio Horrocks quien nos advierte de sus modestas capacidades como escritor. Quizás el neozelandés carezca de la sofisticada gramática del venerado guionista de "V de Vendetta", pero "Sam Zabel y la pluma mágica" contiene la misma honestidad desarmante y la misma devoción del autor hacia el medio que ya hicieran de "Hicksville" un título tan especial, en el que resultaba difícil separar las valoraciones (supuestamente) objetivas de ese intangible tan subjetivo y visceral como lo es el amor por los comics. Algo con lo que un servidor puede identificarse desde cada fibra de su ser.