jueves, octubre 21, 2010

Hablemos de Dios

“Si Dios existe, espero que tenga una buena excusa.”

Woody Allen


No es ésta la cita con la que se abre “Dios en persona”, el tebeo recientemente publicado por Ediciones Sins Entido (de hecho es otra igualmente mordaz a cargo de Oscar Wilde) pero, dadas las circunstancias, bien podría haberlo sido.

Escrito y dibujado por el francés Marc-Antoine Mathieu, “Dios en persona” nos presenta, a la manera de un documental (con entrevistas a testigos y expertos en la divina materia), la insólita, inesperada y todavía inexplicable encarnación de Dios bajo aspecto humano en el momento histórico presente (o al menos uno que se parece mucho al presente).


Los hechos: un día cualquiera, en una cola del censo, un tipo se presenta como Dios DIOS (nombre: Dios; apellido: DIOS) y a partir de ahí se arma, precisamente, la de ídem. Primero lo toman por loco y lo someten a terapia; luego deciden estudiarlo desde el ámbito científico y, cuando ya no parece haber duda de que Dios es realmente quien dice ser, va la humanidad y hace lo que siempre se le ocurre en estos casos: por un lado, lo mercantiliza, intentando sacarle al asunto cuanto céntimo de dólar y euro se pueda; por el otro, lo lleva a juicio, acusándolo de irresponsabilidad para con su obra: la creación y todo lo que ella alberga.

Podría parecer, dadas las circunstancias, que Mathieu se ha metido en un berenjenal metafísico de difícil solución (intentar aportar un sólo gramo de verdad sobre la controvertida posibilidad de que Dios exista o no lo haga implica inevitablemente un fracaso), pero lo cierto es que el artista galo finta elegantemente la responsabilidad de meter las manos en la masa teológica y lleva el asunto a un terreno que, al menos a mí, me resulta infinitamente más interesante: el antropológico y social.

Así, "Dios en persona" no trata tanto de la figura de Dios ni de las posibles certezas que sobre su "persona" podamos tener (básicamente ninguna) como sobre la reacción que la constatación de su existencia supondría para el género humano. ¿Cómo reaccionaríamos si un buen día se despejasen todas nuestras dudas y se concretase, definitivamente, el hecho de que Dios sí existe? ¿Cundiría el pánico, nos volveríamos todos creyentes de golpe, lo recibiríamos con loas y alabanzas o lo desprieciaríamos por todo aquello que no nos gusta de unas vidas que jamás le pedimos tener?

Tampoco se detiene aquí Mathieu, sino que, sabedor de que tiene entre manos un concepto totalmente extremo, capaz de impregnar cualquier aspecto de nuestro continuum social, decide aplicarlo a terrenos tan dispares como la psicología de los medios de comunicación, la economía, la tecnología o el arte contemporáneo para poner en práctica su puntería y dedicarse a lanzar dardos envenenados (envenenados con sarcasmo e ironía, quiero decir) que tanto apuntan al fenómeno social de la telerrealidad como a los tejemanejes de la industria literaria, sin olvidarnos del (históricamente irreconciliable) binomio ciencia-religión.

Y lo hace, además, empleando unos diálogos ágiles y certeros, plagados de innumerables referencias y guiños que van de lo obvio (los juegos de palabras) a la más deliciosa sutileza, pasando por una abundancia de paráfrasis que cobran pleno sentido en el contexto en que se integran.

Todo ello se apoya visualmente en un dibujo sencillo y expresivo, con el blanco, el negro y el gris como únicas herramientas cromáticas y un estilo narrativo sobrio y directo que no hace concesiones a recursos superfluos. Lo más sorprendente desde el punto de vista gráfico quizás sea la inusual habilidad de Mathieu para la ubicación espacio-temporal de la acción, pues los cambios de escena se suceden continuamente sin que uno necesite más que una simple viñeta, a veces con un par de elementos sobre un fondo totalmente negro, para situarse perfectamente y no perder el hilo de los acontecimientos.


Resulta, pues, que “Dios en persona” no es sólo un tebeo inteligente, divertido y estupendamente dibujado, sino también un brillante ejercicio de auto-evaluación colectiva del que en última instancia se desprende una tesis tan antigua como el teatro griego y su archiconocido deus ex machina: el día que realmente necesite a Dios, ya se encargará el hombre de inventarlo.

13 comentarios:

Nonchalant Debonair dijo...

Cuando se anunció la publicación de este comic lo apunté en mi lista de la compra. Cuando lo hojeé en la librería me enfrié considerablemente y esperé a tener más elementos de juicio. Con la lectura de su reseña y todo lo favorable que es, cuanto más avanzo, menos ganas tengo de meterme en él, fíjese.

J.J. González Haro dijo...

Creo que es una opcion interesante si se busca un tebeo de los que te hacen pensar...

Lo tendre en cuenta la proxima vez que visite la tienda de comics

Jero Piñeiro dijo...

Fran: de hecho, una de las cosas que más llaman la atención de este tebeo es su frialdad. No hay "drama" (en el sentido más amplio de la palabra) en "Dios en persona". Es un tebeo puramente intelectual, que funciona más como un ensayo que como un relato en el sentido tradicional. Uno no puede sentir absolutamente nada por los personajes, pues sólo aportan su testimonio y su opinión, no se involucran personalmente. Y con Dios, la verdad, es muy difícil empatizar.

Con todo, y aunque no vayas a hacerme caso (en tu derecho estás), te lo recomiendo más como "algo original" que como "algo que seguro que te va a gustar". Porque eso sí que no lo sé...

Kin G. Haro: desde luego no es una lectura tan ligera como un "Amazing Spider-man" o un "Naruto". Pero de ese estilo, la verdad, hay un millón de tebeos prácticamente intercambiables, y como "Dios en persona" hay más bien pocos. Si me dan a elegir, me quedo con "los de pensar", como tú los llamas (yo diría que son simplemente "de los buenos", jejeje).

J.J. González Haro dijo...

Hombre Jero, nunca he leido Naruto (aunque me han dicho que es bastante divertido), la verdad es que de Manga no suelo consumir mucho.

En cuanto a lo de Amazing Spiderman, hombre claro que hay historias "intercambiables" como tu dices, pero como me da en la nariz que los subestimas un poco me gustaria señalarte que esos "Amazing" han tratado temas tan importantes como las drogas, los conflictos interraciales, la autoestima y la responsabilidad, ademas de fomentar ciertos valores que hacen mucha falta en tiempos como los que corren.

En cuanto a lo de comics "buenos", para mi cualquiera que consiga que vuelva a releerlo con ganas ya ha cumplido su cometido (entretener y divertir).

Y cuando hablo de cosas serias, pues me refiero a cosas como Mauss, u otras obras q plantean realidades aprovechando el formato comic ( como Persepolis).

En fin, no se debe menospreciar a los comics solo por su tematica de aventuras, ni se puede pensar que solo ciertos productos son buenos porque estan destinados a un publico intelectual que es capaz de decir cosas como "es mas como un ensayo".

Jero Piñeiro dijo...

Kin G. Haro: perdona, creo que nos hemos malinterpretado mutuamente (y además, releída ahora, mi respuesta a tu comentario suena más prepotente que buenrollista, que era lo que realmente pretendía).

A ver si me explico: yo no menosprecio ningún género. Ninguno en absoluto. De hecho, me alucinan los super-héroes (probablemente la mitad de mi colección de tebeos se adscriba a ese género) pero, ojo, me gustan los tebeos de super-héroes que me hacen pensar. Si me paro a enumerar los comics de Spider-man que he leído, apenas 5 ó 6 me parecen realmente buenos tebeos (y hablo de números grapados, no de sagas concretas). Me pasa más o menos lo mismo con la plana mayor de Marvel. Me gusta mucho el Daredevil de Miller, la saga de "Futuro imperfecto" escrita por Peter David para Hulk o los dos primeros volúmenes de Mark Millar y Bryan Hitch en "The Ultimates". Hay unos cuantos, vamos, pero no llegarían ni al 5% de los comics Marvel que he leído.

En general, en Marvel (y también en DC) lo que abunda es la mediocridad o, directamente, la basura. ¿Por qué? Porque a la gente que los escribe (y a los editores, ojo, que estos son casi peores) les importa más la resurrección de turno, el nuevo cambio de uniforme o la espectacular nueva alineación de los Vengadores que escribir buenos diálogos, personajes coherentes y proponer eso que se necesita para hacer auténtico arte: ideas.

Así sucede que cuando uno se encuentra con tebeos como "Top Ten", "Sleeper", "Invencible", "Planetary" o "All-Star Superman" le hacen los ojos chirivitas y el culo gaseosa.

Al final de cada año, en esos top 10 de comics tan rimbombantes y pagados de sí mismos que acabo publicando, es realmente extraño que me tope con más de un par de comics de super-héroes. No porque el género no tenga infinitas posibilidades, sino porque la mayoría de sus autores producen por kilo y de forma automática.

Inevitablemente, los tebeos que más me gustan resultan ser otros cualesquiera que sí me parezcan inteligentes, como este "Dios en persona". Y, habida cuenta de que la proporción de grandes obras entre "comic de autor" y "comic de super-héroes" está muy desequilibrada, al final servidor acaba dirigiéndose casi siempre a la estantería de comic europeo e independiente, porque sabe que en el género de las capas y los antifaces es realmente difícil que encuentre algo que pueda hacerle pensar un poco...

(continúa)

Jero Piñeiro dijo...

Me entristece darme cuenta de que para la mayoría de lectores, los comics son, como tú dices, un mero vehículo de entretenimiento y diversión, y que otras aspiraciones mayores se reservan únicamente para muy contados títulos ("de culto", "intelectuales", "minoritarios" y no sé qué más). Eso me parece igual que el que va al cine sin más pretensiones que pasar dos horas de su vida sin aburrirse. Y no, coño, el cine no es eso. Ni los comics, ni la literatura, ni la música, ni las series de televisión. Eso son subproductos, como la comida basura, que te llena el buche pero no te alimenta.

Yo quiero series de televisión como "The Wire" o "Los Soprano" y no "quiero-y-no-puedos" infantiles como "Héroes" o "True blood". Quiero discos que pueda escuchar dentro de diez años y sentir que no ha pasado un día por ellos, como "Born to run" o "Highway 61 revisited", y no el grupito de moda que dentro del mismo tiempo va a sonar viejo y apolillado (aquí cabrían cientos de nombres).
Quiero películas que me hagan sentir, que me maravillen, que me angustien, pero de verdad: "Un profeta", "El curioso caso de Benjamin Button", "El secreto de sus ojos"... no edulcorados discursos envueltos en celofán y cubiertos de purpurina como "Slumdog millionaire" o ridículos fuegos de artificio sin contenido como "300" o "Sin City". Si eso es gran cine, vamos jodidos.

Y quiero comics de super-héroes como "Miracleman" o "Año uno", con auténtica enjundia; no cagarrutas para frikis sin criterio como "Invasión secreta", "Reinado oscuro" o "Crisis infinita" (que no sé si te gustan o no, igual te sientes insultado por mis palabras y no es lo que pretendo).

El problema, me temo, es que somos culturalmente muy poco exigentes. Queremos nuestro "soma" y poco más. Colorines y ruiditos en la pantalla, gafitas de 3D; cancioncillas pegadizas para descargar, escuchar 15 minutos y luego tirar a la papelera de reciclaje y comics en los que apenas pasa nada y, cuando parece que sí pasa, al cabo de un año todo vuelve a ser lo mismo, pero con un 10% más de tacos y puñetazos.

Igual yo soy muy exigente en con mis formas de ocio, pero ya que voy a pagar algo por bueno y, más aún, ya que sé a ciencia cierta que es posible hacerlo bien, no pienso conformarme con cualquier mediocridad que me haga, simplemente, distraerme un rato.

Dicho lo cual: yo piqué con los primeros tomos de "Naruto" y la verdad es que me parece bastante malo. Mira que intento comprar más manga, ¿eh?, pero el 90% de lo que veo en las tiendas y en las listas de novedades cada mes me parece espantoso...

Nonchalant Debonair dijo...

Si sustituyo los ejemplos que ha puesto por los míos propios, puedo suscribir punto por punto la tesis de nuestro anfitrión.

J.J. González Haro dijo...

Jero: como tu dices, tu comentario mas que buen rollo daba la idea de todo lo contrario.

Me parece alucinante la que estamos montando tras mi (bastante neutro) comentario :

"Creo que es una opcion interesante si se busca un tebeo de los que te hacen pensar...

Lo tendre en cuenta la proxima vez que visite la tienda de comics"

Pero puesto a intercambiar impresiones decirte que me parece genial que seas tan exigente, a mi tampoco me gusta que se me quede la cara de tonto cuando salgo de una sala de ver una pelicula mediocre o compro un tebeo que no vale nada.

Creo que es absurdo pensar que alguien pueda disfrutar con eso (a parte de que haya gustos que merezcan palos), pero despues de tantos batacazos me conformo con no salir despotrincado tras leer o ver la cagada de turno.

Tampoco podemos pretender que con el abanico de posibilidades que hay a dia de hoy todo sea bueno.

Recuerdo cuando empezo el movimiento del Manga en España, que las cosas llegaban con cuentagotas y se apreciaba cada serie. A dia de hoy el mercado esta saturado y el 90% de lo que se publica son productos de baja calidad, y nos puede sentar mal pero no podemos ir por ahi rasgandonos las vestiduras.

Creo que es mejor apoyar a la industria para que siga haciendo cosas, porque prefiero que haya bastante para elegir, aunque con esta actitud se fomente la mediocridad da la casualidad que tb ayuda a que gente desconocida y con mucho talento salga a la luz.

(continua)

J.J. González Haro dijo...

En cuanto a mi defensa de Spiderman, y los comics de superheroes, la he hecho porque me ha parecido muy prepotente tu actitud, sin apenas saber de mis gustos creo que ya te ha hecho un estereotipo del tipo de comprador que soy, y creo que estas muy equivocado.

Actualmente hago colecciones como Bone (simplemente genial), Fabulas (empieza a mostrar sintomas de agotamiento) Los Muertos Vivientes (que decir de ella) Dr. Slump (una serie que se puede tachar de infantil pero que me hacia mucha ilusion tener) Northlander (que dejare en breve) Astrocity (la mejor serie superheroica que creo que se haya hecho).

En fin que creo que no podemos ir imponiendo lo que esta bien y lo que no, no hay verdades absolutas y la mayoria de las veces esto no es mas que una cuestion de gustos. No podemos despreciar a los lectores de Naruto, ni creernos que todo lo Europeo es sublime (acabo de leerme el Beast de Thomas Cheilan y Mateo Guerrero y a pesar de su espectacular dibujo la historia tiene muchas lagunas).

No soy muy aficionado al comic Europeo (creo que la ultima coleccion que hice de esa tematica fue SIETE, que tenia sus altibajos)

Esa lista te la he hecho para que sepas que no soy el tipico marvel/dc Zombie y para que en siguiente encuentros que tengamos (no te creas que esto me ha sentado mal, como ya he dicho otras veces en sitios donde hemos coincidido me gustan las diferencias de opiniones ) no te muestres con tanta condescendencia por los lectores de los comics de grapas.

En fin espero que nos sigamos leyendo durante mucho tiempo y que seamos capaces de seguir enfrentando nuestras opiniones siempre desde el respeto.

Fran G. Lara: tio mojate un poco mas, que para eso estan los foros y los blogs..

Nonchalant Debonair dijo...

Kin, tengo mi propio blog, colaboro en Sigue al Conejo Blanco y Nuestros Comics, escribo artículos para alguna revista e intento sacar adelante mi primera novela. No doy abasto para teclear más y Jero ha expuesto perfectamente lo que opino, no puedo añadir ni una coma.

Jero Piñeiro dijo...

De verdad que no pretendía ir de sobrado, Kin G. Haro. Es que a veces con esto de escribir en lugar de hablar se pierde el tono del mensaje, la información no verbal, y las cosas suenan como no son. Dicho lo cual, yo intento no variar mi opinión en el blog independientemente de que me esté dirigiendo a un MarvelZombie o a un Gafapasta (por identificar de alguna manera ambos extremos en las tipologías del lector de comics). Simplemente escribo lo que pienso y si alguien se da por aludido o se siente atacado, lo mejor es que lo diga en los comentarios y que no haya malos rollos.

Lo cierto es que no tengo ni idea de qué tipo de tebeos lees (de la lista que mencionas hay cosas que me gustan mucho y otras que no; pero eso es subjetivo, ya lo sabemos). Cuando te respondí no me planteé si sólo leías comics de un tipo o si le dabas a todos los palos. Ya digo que yo simplemente respondo lo que pienso, no me adapto al interlocutor (al menos en mi blog, en el resto de espacios, tanto virtuales como sociales, intento ser más comedido por pura cuestión de educación). También es cierto que tú no te has parado a revisar mi blog y descubrir cuáles son mis gustos (hay por ahí montones de entradas sobre super-héroes, la última precisamente a propósito de “Astro City”), por lo que ya ves que el malentendido ha sido mutuo.

Tampoco creo haber dicho que todo lo europeo sea sublime (porque no lo pienso) ni que los lectores de “Naruto” sean más tontos que los lectores de, no sé, “From Hell”. Pero sí opino que “From Hell” es un tebeo como la copa de un pino y “Naruto” es tan profundo como un sudoku. Y si alguien me dice que “From Hell” le parece una castaña y “Naruto” lo más de lo más, resultará que no estamos de acuerdo. Lo cual no significa que yo sea más listo ni más nada: simplemente no comparto su criterio y, en consecuencia, posiblemente le preste menos atención a sus opiniones y recomendaciones. Al final es algo que hacemos todos continuamente, ¿no? Fiarnos más del gusto de quien comparte una opinión parecida a la nuestra.

Yo también compro grapas. Ahora mismo no tantas como hace un tiempo (dejé de coleccionar muchas cabeceras Marvel después del chasco de “Invasión secreta”), pero sigo con interés series como “Astonishing X-Men”, “Ultimate Vengadores”, “Batman y Robin”, “La noche más oscura” o “Green Lantern” (todas ellas en cuadernillos grapados) y otras también de super-héroes, pero en tomos, como la mentada “Astro City”, “Powers”, “Invencible”, Ex Machina” o “Umbrella Academy” (bueno, ésta cuando sale, jejeje). Vamos, que llevo muchos años leyendo super-héroes sin ningún tipo de complejos hacia el género, y seguiré haciéndolo siempre y cuando sus propuestas me resulten interesantes. ¡Al nuevo de “Planetary” le tengo unas ganas que no veas!

Por cierto: a mí “Dr. Slump” me encanta, me río muchísimo con ella. A veces creo que confundimos la palabra “infantil” con “para todos los públicos”. Uno de mis libros favoritos es “El Principito”, que pasa por ser literatura “infantil” y que a mí me parece de una madurez intelectual y emocional desarmante... No digo que “Dr. Slump” y “El Principito” se parezcan, simplemente creo que a veces las etiquetas se otorgan un tanto a la ligera...

Volviendo al manga: yo cuando se produjo el boom del comic nipón aún era muy crío y me lo tragaba todo, desde “Akira” hasta “Ah! mi diosa”. Luego con los años fui formándome un criterio más elaborado y actualmente me inclino más hacia autores como Tezuka, Urasawa, Taniguchi o el tándem Koike/Kojima (que me vuelve loco). Pero no le haría ascos a una reedición en condiciones de “3x3 Ojos” o “Dragon Quest” (quizás me puede la nostalgia, jeje), y me lo he pasado bomba con títulos (llamémosles) mainstream como “Death Note” o los primeros tomos de “Berserk” (después del 13 la cosa se desinfla cosa mala...)

Así que ya ves, ni tú eras un MarvelZombie ni yo un Gafapasta, jejeje (y, ahora sí, espero que lo entiendas como una broma).

Buf, tienes razón: lo que ha dado de sí tu comentario, jajajaja...

J.J. González Haro dijo...

Fran G. Lara : tranquilo cada uno sabe el tiempo que tiene y solo queria introducirte de forma mas activa en el debate. A ver si me paso por esas paginas que comentas.

Jero: Vamos a dejarlo correr, tienes razon que con el lenguaje escrito a veces no podemos darle ese tonillo tan caracteristico que tenemos los españoles y que quizas a veces se entiendan las cosas como no son.

Tienes razo en que no me he parado a revisar tu blog (solo lo sigo des de hace unos meses) pero tampoco fui yo el que comenzo esto.

Yo tampoco quiero malos rollos, y para mi no los hay. Me encanta discutir y conversar sobre los temas que me gustan. No hay muchas oportunidades de gente que de verdad se pringue con sus opiniones, y yo como tu intento ser fiel a mis opiniones.

No se que edad tienes (yo solo tengo 28) y vivi de forma muy intensa el boom del manga en España ( con 10 añitos ya tenia un club de fans de Dragon Ball donde haciamos un pequeño fanzine, y con 14 estuve en TVE presentando con unos amigos unos de los primeros fanzines digitales que se hicieron, se llamaba Wakusei y Guillen Caballe, el de Rockola 40, fue nuestro padrino).

Dragon Quest (Espero que si la reeditan en tomos como Dragon Ball y Dr. Slump no las llamen Las Aventuras de Fly) es una de esas cosillas que espero con ansias, quizas por el mismo recuerdo nostalgico que tu, y por ver como acababa la cosa.

Yo tb disfrutaba con 3x3 Ojos, y Ah Mi Diosa, y me sento muy mal que cerraran el Shonen, pero desde entonces el manga casi no ha sido para mi (casulmente de lo ultimo divertido que he leido ha sido Berserk, aunque solo los 3 primeros tomos).

Tambien me encanta el Principito, que ocupa un hueco muy importante en mi casa.

Espero que seamos capaces de seguir leyendonos mutuamente, y de tener estos intercambios, que fuera de molestarme (bueno me molesta un poco que se den cosas por sabidas, pero eso ya lo dejamos atras) realmente deben acercarnos mas y hacer que veamos como somos cada uno.

Me siento muy satisfecho de esta conversacion y seguire por aqui atento para hacer que teclees hasta gastar las teclas de tu teclado.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con Jero.
Thor es Señor en Asgard.